Menstruación y las fases de la Luna
Antiguamente ciertas tribus creían en la afinidad del ciclo menstrual con las fases lunares.

Estas 4 etapas que experimenta la mujer (fase preovulatoria, ovulatoria, premenstrual y menstrual) se describen como un ritmo de cuatro etapas que refleja la Luna (creciente, luna llena, menguante y luna nueva) cada una con una característica asociada a la energía y el poder que las predomina según el momento del ciclo.
Teniendo esto en cuenta se puede explotar al máximo la fuerza y la sabiduría que cada mujer posee haciéndose consciente de la relación íntima que existe con el universo.Esto no quiere decir que todas menstruamos en el mismo momento. Son arquetipos y el juego está en reconocer de qué manera nuestro ciclo menstrual se relaciona con la energía que la Luna irradia sobre nosotros durante cada fase.
LUNA CRECIENTE: Cuando la menstruación llega en esta fase la energía es de tipo constructiva, creativa, alegre, dinamica. El flujo puede ser un poco más abundante en este momento y puede haber una tendencia a estar más emocional.
LUNA LLENA: La fuerza de la Luna en esta etapa nos transmite una vibración de entusiasmo, espiritualidad y armonía. El flujo puede ser exuberante y hasta con hemorragias. También puede ser que en desarmonía los conflictos que tenemos salgan a la luz
LUNA MENGUANTE: En este momento invade la necesidad de mirar hacia el interior y desechar lo que nos perjudica, poder soltar y tomar el camino de regreso a casa. El flujo es menos abundante pero puede durar más días. Solo se tiene la necesidad de estar con una misma.
LUNA NUEVA: Esta es la fase en la que el ciclo llega en su etapa natural por eso comparte las características de la Luna en forma potenciada. Esta energía que se experimenta es de introspección. reflexión, visionaria. Plena sabiduría que que emana la “luna negra”.
Momento de estar para una misma sintiendo que en el vacío y la muerte hay una semilla de renacimiento.